miércoles, 29 de agosto de 2012

sábado, 24 de diciembre de 2011

Nuevo estudio sobre infidelidad



Hace pocos días un importante sitio web dio a conocer los resultados de un estudio sobre infidelidad realizado recientemente. En este artículo repesaremos los datos más destacados de dicha investigación.

Mientras que la mayoría de los hombres encuestados prefieren mantener sus encuentros con su amante luego del trabajo, siendo la excusa más usada la famosa “reunión de trabajo que se demoró”, las mujeres por lo general tienen sus aventuras extramatrimoniales en horario laboral, casi siempre durante la hora del almuerzo. En cuanto al lugar de encuentro, el hotel alojamiento es el sitio más elegido tanto por los hombres como por las mujeres. Por otro lado, mientras que los hombres escogen la casa de sus amantes como segundo lugar preferido para llevar a cabo sus trampas, las mujeres prefieren el auto.

¿Los motivos más mencionados en la encuestas? Por las mujeres, la falta de romanticismo. Por los hombres, la falta de sexo y de variedad erótica con sus parejas. La monotonía a la hora del sexo juega un papel sumamente importante en el momento de decidir engañar a la pareja.

De acuerdo con los datos arrojados por este estudio, los hombres infieles tienen en promedio y
unos 40 años y las mujeres tienen en promedio unos 33 años. Además, la mayoría de ellos, más del 80%, tienen hijos. Algunos de los infieles buscan una relación ocasional y otros prefieren tener amantes a largo plazo. Muchos de quienes buscan nuevas aventuras lo hacen a través de sitios web dedicados específicamente a que quienes desean ser infieles a sus esposas o maridos conozcan a sus futuros amantes.

En cuanto a los países de origen de los infieles, España, Italia, México y Brasil encabezan la lista.
Estos son sólo algunos datos que ilustran un poco el panorama actual del mundo de la infidelidad. Un mundo cuya puerta siempre se abre desde adentro, según aseguran los expertos.

miércoles, 22 de junio de 2011

-¡Jamás alguien soltero!

Es sabido que hay muchas personas que no pueden controlar su deseo de estar con alguien cuando este aparece. Así es que muchas mujeres casadas y muchos hombres casados no pueden contenerse de mantener asuntos extramatrimoniales con cuanta persona se les cruce por el camino.

Pero esta situación no sólo le ocurre a personas casadas. Los solteros también experimentan este tipo de sentimientos y muchos casos esta es la causa de que no puedan comprometerse y formar una pareja estable.

Pero, ¿qué ocurre cuando todas las personas que te interesan están casadas? Para algunas personas puede tratarse de solamente de una coincidencia mientras que hay muchos especialistas que opinan lo contrario y que existe una cierta predisposición en estas personas por involucrarse en asuntos extramatrimoniales de otras personas.

Desde el punto de vista de la psicología, puede afirmarse que las personas que sólo sienten atracción y deseo por hombres casados o mujeres casadas no se valoran a sí mismos y se menosprecian.

Es decir, no sienten que son capaces de formar su propia pareja y solo se conforman con ocupar el segundo lugar.

Con tus primeras relaciones tal vez no tengas demasiados problemas pero, con el tiempo, puede ocurrir que sientas que has perdido el tiempo y que no has podido conformar tu propia pareja.

En todo caso, es tu decisión con quién vivirás tus aventuras, aunque sólo seas la trampa y la relación ocasional de otro. Los inconvenientes aparecen si en algún momento de tu vida comienzas a replantearte la posibilidad de casarte y formar tu propia familia, sin terceros.

Además del ello, hay ciertas cosas que debes tener en cuenta si decides ocupar el segundo lugar eternamente.

En primer lugar, siempre deberás esconderte con tu pareja ya que el infiel busca relaciones discretas. Por ello no será fácil ir juntos a lugares públicos como un cine, una plaza o un restauran. Y si lo hacen, el infiel siempre estará pendiente y asustado de que alguien lo vea y lo descubra manteniendo un asunto extramatrimonial.

Por otro lado, es muy posible que debas pasar solo o sola las fechas importantes o las festividades. Para dar un ejemplo, no esperes que la persona con quien tengas una relación esté contigo en San Valentín ya que deberá quedarse con su cónyuge.

Tampoco esperes que tu pareja esté disponible cuando tú lo desees. Siempre deberás adaptarte a sus tiempos y, en muchas ocasiones, los encuentros entre ambos no durarán mucho tiempo.

Si tienes todos estos puntos en claro, evitarás sufrir y podrás disfrutar de tu relación sin ningún problema.